¿A que tiene buena pinta? Receta sanísima y con poquísimas calorías, perfecta para nuestra operación bikini.
La salsita que veis no es aceite si no el jugo de la sandía y la cebolla...
INGREDIENTES (Para 2 personas)
1 Pechuga de Pollo entera
1 Rodaja de Sandía
1 Cebolla
2 Limones
Un poco de queso fresco
Aceite y Sal
Lo primero que tenemos que hacer es meter en una bolsa de plástico (tipo las que se usan para asar) las pechugas, las salamos y le añadimos el zumo de 1 limón. Mezclamos bien para que el pavo se impregne bien del zumo de limón y reservamos en la nevera mientras preparamos el resto de la receta.
Cortamos la sandía en cubos de 1cm aproximadamente y la cebolla bien picada.
En una sartén honda o un wok (si tenéis), pochamos con 2 cucharadas de aceite la cebolla hasta que se ponga un poco transparente, entonces bajamos el fuego y le añadimos la sandía y salamos.
A fuego medio vamos pochando las dos cosas e iremos comprobando que se va formando un caldo naranja, es el agua que pierde la sandía con el calor y la cebolla. Pocharemos aproximadamente unos 10 minutos o hasta que veamos que la sandía empieza a deshacerse. Todo este proceso es importante que sea a fuego bajo/medio.
Mientras tanto en una sartén a fuego fuerte hacemos la pechuga, que en este caso tengo cortada en dos trozos, y cuando se haya sellado un poco bajamos el fuego para que se hagan bien por dentro.
Salamos al final y la cortamos como más nos guste y le ponemos la sandía y y la cebolla que tengo reservadas por encima. Añadimos el queso fresco y a disfrutar...
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